jueves, 27 de abril de 2017

Males prevenibles que más acortan la vida.

Los problemas cardio-vasculares no son los principales, como podría creerse.

Tabaquismo, hipertensión, diabetes, colesterol… todos son factores de riego bien conocidos. Sin embargo, la palma de las causas prevenibles de pérdida de años de vida se la lleva la obesidad.
Hace perder más años de vida que la diabetes, el tabaco, la hipertensión y el colesterol alto, los otros males principales -y prevenibles- que más reducen la duración de la vida, según un estudio de 2014 llevado a cabo en los Estados Unidos.
Es fácil, gratuita y no nos hace sudar; pero bajará el riesgo de cáncer, ictus, diabetes, depresión...
"Los factores de riesgo conductuales modificables suponen un problema de mortalidad apreciable en EE. UU.", afirmó el autor principal del estudio, Dr. Glen Taksler, de la Clínica Cleveland, en Cleveland, Ohio. "Los resultados preliminares enfatizan la importancia deadelgazar, gestionar la diabetes adecuadamente y llevar una alimentación sana", dijo Taksler en un comunicado de prensa de la clínica.
Los resultados muestran que la obesidad está vinculada con hasta un 47 por ciento más de años de vida perdidos que el tabaco, que tenía el mismo efecto en la esperanza de vida que la hipertensión.
Los investigadores indicaron que tres de las cinco causas principales de años de vida perdidos (la diabetes, la hipertensión y el colesterol alto) se pueden tratar. Y ayudar a los pacientes a comprender los métodos, las opciones y los enfoques de tratamiento puede tener un efecto significativo, indicaron. Los hallazgos también enfatizan la importancia de la atención preventiva, y de por qué debería ser una prioridad para los médicos.
Además, el 58% (mujeres) y el 80% (hombres) tendrán exceso de peso.
Con todo, los investigadores reconocieron que la situación de algunos pacientes podría ser distinta que las de la población general. Por ejemplo, en un paciente obeso y alcohólico, el alcohol podría ser un factor de riesgo más importante que la obesidad.
"La realidad es que, aunque podamos suponer con conocimiento de causa el porqué de la muerte del paciente (por ejemplo, un cáncer de mama o un ataque cardiaco), no siempre conocemos los factores subyacentes, como fumar, la obesidad, el alcohol y los antecedentes familiares", comentó Taksler. "Para cada causa principal de muerte, identificamos la causa originaria a fin de establecer si se hubiera podido prevenir la muerte".
Los hallazgos fueron presentados en la reunión anual de la General Internal Medicine, en Washington, D.C.

El consumo de grasas y colesterol es controvertido y siempre ha generado polémica (y la que generará...)
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miércoles, 26 de abril de 2017

¿Qué es el nivel de glucosa en la sangre, o la glucemia?.

Niveles de Glucosa en la sangre.

          El nivel de glucosa en la sangre es la cantidad de glucosa (azúcar) que contiene la sangre. El nivel de glucosa en sangre también se denomina glucosa en suero y glucemia. La cantidad de glucosa que contiene la sangre se mide en milimoles por litro (mmol/l) o en miligramos por decilitro (mg/dl).


Normalmente, el nivel de glucosa en sangre se mantiene dentro de límites estrechos a lo largo del día ( 72-145 mg/dl; 4-8 mmol/l). Sin embargo, sube después de las comidas y es más bajo por la mañana antes del desayuno.
Las personas con diabetes se caracterizan por tener niveles de glucosa más altos de lo normal.

   ¿Por qué hay que controlar los niveles de        

    glucosa en la sangre?.

 

      En las personas diabéticas es muy importante que el nivel de glucosa se mantenga dentro de cifras normales y éste es el objetivo principal del tratamiento; hay que evitar que la glucosa pase de los límites normales tanto por elevarse como por descender demasiado.
Si el nivel de glucosa en sangre se mantiene dentro de unas cifras normales, se reduce considerablemente el riesgo de desarrollar complicaciones de la diabetes. Estas complicaciones pueden aparecer entre 10 y 15 años después del comienzo de la diabetes de tipo 1 y generalmente antes de los 10 años en los casos de diabetes de tipo 2.
Estas complicaciones (entre otras) consisten en:

Neuropatía (lesión de los nervios de las extremidades y los órganos)
 ¿Cómo puedo medir los niveles de glucosa en la sangre?.

      Los niveles de glucosa en sangre se pueden medir en el propio domicilio de forma muy sencilla y rápida con un aparato muy fácil de manejar. Los hay de varias formas y tamaños, y todos ellos contienen al menos dos elementos: el aparato de análisis en sí mismo y una tira de plástico donde se deposita una gota de sangre con la que se hace la medida.

Se pone una pequeña cantidad de sangre en la tira y se introduce en el aparato. Después de un tiempo corto (por lo general, inferior al minuto), se muestra el resultado del nivel de glucosa en sangre en la pantallita del medidor. El mejor método para obtener una muestra de sangre suficiente, consiste en punzar el dedo con una aguja especial llamada lanceta.

Otra forma de medir esos niveles de azúcar es mediante un análisis de sangre clásico o estándar con la extracción de una muestra de sangre de una de las venas del antebrazo.

¿Cuál es el nivel de glucosa o azúcar adecuado?.

Dependiendo del laboratorio, los valores óptimos son:
  • 72-110 mg/dl (4 -7 mmol/l) en ayunas
  • Inferior a 180 mg/dl (10 mmol/l) si se mide una hora y media después de las comidas.
 ¿Con qué frecuencia se debe medir el nivel de glucosa de la sangre?

Diabetes de tipo 1.

      Las personas que padecen diabetes de tipo 1, o las que padecen diabetes tipo II y están recibiendo tratamiento con insulina, deben medir su nivel de glucosa en sangre al menos una vez al día: por la mañana antes de desayunar, o a la hora de acostarse. Medir los niveles de glucosa en sangre antes del desayuno permite ajustar la cantidad adecuada de insulina en función de los valores de glucosa que pueden fluctuar de unos días a otros.

También deben efectuar un perfil de los niveles de glucosa durante 24 horas dos veces por semana. Esto implica medir los niveles de glucosa en sangre antes de cada comida y antes de acostarse.

Diabetes de tipo 2.

      El autoanálisis de la glucosa en pacientes diabéticos está indicado para proporcionar datos de la glucemia al paciente y al equipo sanitario que ayuden a la toma de decisiones sobre el tratamiento o para contribuir al autocontrol del propio paciente. Para poder realizar la medición de la glucosa se requieren los instrumentos para la punción, las tiras reactivas y el glucómetro para medir los resultados.

En la actualidad, la evidencia científica sobre el papel del autoanálisis de la glucosa como herramienta para el auto cuidado en pacientes con diabetes de tipo 2 que no requieren insulina concluye que no hay mejoría en el control de la glucemia ni en las cifras de hemoglobina glicosilada. Los estudios no han demostrado beneficios en términos de satisfacción del paciente, de bienestar general, ni de calidad de vida. El autoanálisis supone un importante coste para el sistema sanitario público.

El autoanálisis en los pacientes diabéticos de tipo 2 no insulinizados debe reservarse para aquellos con controles inestables, en pacientes propensos a la hipoglucemia o cuando exista un cambio de tratamiento (dosis de medicamento, cambios en la dieta).

En cualquier caso, deben consultar con su médico. De esta forma, se reduce el riesgo de desarrollar complicaciones tardías de la diabetes.
Niveles de glucosa en sangre a la hora de acostarse
El nivel de glucosa en sangre a la hora de acostarse debe estar entre 126-180 mg/dl (7 y 10 mmol/l).

Si a dicha hora la glucosa en sangre es muy baja o muy alta de forma repetida, es posible que necesite modificar la dieta que realiza o la dosis de insulina. No olvide consultarlo con su médico.

¿Cuándo debe medirse la glucosa en sangre?.

      La glucosa en sangre debe medirse siempre que el paciente no se sienta bien o cuando crea que puede ser excesivamente alta o baja. También durante las enfermedades que conlleven fiebre de más de 37,8º C.

Los enfermos diabéticos cuyo nivel de glucosa en sangre sea alto (superior a 360 mg/dl; 20 mmol/l) y que presenten indicios de azúcar en la orina deben comprobar que ésta no tenga acetona. Para ello pueden utilizar una tira para determinación de acetona en orina.

Si aparece acetona en la orina, es una señal de advertencia de que está iniciándose una acidosis diabética. En ese caso deben consultar sin demora al médico.

¿Qué es la hemoglobina glicosilada?.

      El análisis de hemoglobina glicosilada en sangre (HbA1c) indica la cantidad de hemoglobina de la sangre que está unida a la glucosa. Esto significa que una molécula de hemoglobina del organismo se ha unido a una molécula de glucosa.

Es un indicador del tiempo que ha permanecido excesivamente elevada la glucemia y refleja el efecto de los niveles de glucosa presentes durante las últimas 6-8 semanas.

Este análisis se debe realizar con sangre obtenida del brazo del paciente. Actualmente existen en el mercado aparatos medidores de la hemoglobina glicosilada automáticos que pueden determinar esta prueba sólo con una gota de sangre del dedo y sin tener que obtener una muestra de la vena (química seca).

El porcentaje normal está comprendido entre el 6% y el 7%. No hay unas cifras idénticas sobre los valores normales de hemoglobina glicosilada en diversos hospitales, pero en términos generales, se puede afirmar que para un diabético, un nivel de:

·         6%-7 % (según criterios de la Asociación americana de diabetes y la sociedad europea de diabetes).
·        7 %-8 % está algo elevado.
·        Un valor superior al 8 %-9 % es demasiado alto. 
Fuentes: 
Dr. Jan Erik Henriksen, especialista en Endocrinología
Dr. Henning Beck-Nielsen, especialista en Endocrinología
Dr. Ian W. Campbell, médico general
Dr. Patrick Davey, especialista en Cardiología
 Actualizado: 01-03-2017 Revisado por: Dr. Gonzalo Martín Peña, especialista en Medicina Interna y Nutrición Clínica
Dr. Salvador Pertusa Martínez, Médico de Familia y Director Médico de Net doctor


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lunes, 27 de marzo de 2017

Como Cuidar las Heridas si tienes Diabetes



Las heridas y la diabetes son enemigos incompatibles, especialmente si ocurren en los pies. El tener una mala circulación en las piernas, las arterias más estrechas y la pérdida de sensibilidad debido a una neuropatía (problema con las terminaciones nerviosas), pueden retrasar la cicatrización, aumentar la posibilidad de infecciones y hasta aumentar el riesgo de perder la pierna. Es importante que sepas como tratar una herida o un rasguño, aunque te parezcan inofensivos, para evitar posibles complicaciones.
Por lo general, un pinchacito en un dedo del pie, una ampolla que sale por el roce de un zapato, o  una cortada al afeitarnos, no nos preocupa mucho. Arden un poco, molestan, pero al poco tiempo ni nos acordamos. Si tienes diabetes no puedes darte ese lujo. Conviene que aprendas a tratar esas heridas leves para que evites infecciones y que la herida cicatrice lo antes posible.
Las heridas pueden complicarse en los pacientes con diabetes
La diabetes, además de cambiar la forma en que tu cuerpo produce, controla y utiliza la glucosa, acarrea otra serie de complicaciones que pueden obstaculizar y retardar la curación de las heridas, aunque sean leves. Entre estas se encuentran:
  • Daños en los nervios (neuropatía): los nervios responsables de recibir las sensaciones en la piel pueden estar dañados cuando la diabetes no ha estado controlada. Esto te pone en riesgo de tener menos sensibilidad en los pies, y entonces puedes no te darte cuenta de que tienes una ampolla, una úlcera o una herida hasta que se ésta empeora o se infecta.
  • Un sistema inmunológico debilitado por los niveles elevados de la glucosa (el azúcar) en la sangre, lo que aumenta las posibilidades de que una herida se infecte.
  • Arterias más estrechas, lo que dificulta una buena circulación, que es un factor fundamental a la hora de promover la cicatrización y la curación de las heridas.
Trata la herida sin perder un momento
No importa si es pequeñita, casi un rasguño, si se trata de una herida, dale toda la importancia del mundo. Tu salud está en juego. Esto es lo que tienes que hacer:
1.     Sin perder tiempo, deja lo que estás haciendo y trata la herida de inmediato. Mientras más tiempo esperes, más tiempo tienen las bacterias de infectar la herida.
2.     Límpiala bien: deja correr agua de la pila sobre la herida para eliminar cualquier suciedad. No uses ni jabón, ni ningún otro producto que pueda irritarla. Aplica una pomada con antibiótico para prevenir infección y cúbrela con una gasa estéril. Cambia la gasa diariamente. Después de que la herida haya cerrado, sí puedes usar jabón para limpiar el área alrededor de la misma. Mantén la herida cubierta para evitar la contaminación y la infección y mantén el área afectada bien humectada. Revisa bien la herida diariamente para buscar cualquier síntoma de infección (enrojecimiento de los bordes, inflamación, pus o dolor).
3.     Si notas algunos de los síntomas anteriores, llama al médico. Es preferible que sea él o ella quien determine la seriedad del caso y te recomiende qué hacer. Si la herida se infectó y el doctor te ha rectado antibióticos orales (tomados) o tópicos, aplícalos o tómalos sin falta. Si la infección no responde al tratamiento en casa, será necesario atenderla en un hospital.
4.     Si la herida es en la planta de los pies, evita poner presión sobre la misma. Esta es una zona del cuerpo en la que los diabéticos a menudo tienen callos y úlceras. Si tienes una ulcerita o una herida en la planta del pie, eleva la pierna lo más que puedas para que pueda cicatrizar y sanar más rápidamente.  Es posible que necesites usar un bastón, una bota especial  y hasta una silla de ruedas para evitar que el pie no esté en contacto con el suelo.
5.     Dependiendo de como responda la herida y como vaya cicatrizando, quizá necesites visitar al médico regularmente para que la limpie quirúrgicamente, y así elimine la piel y los tejidos muertos para facilitar que sane. Es probable que el doctor envíe muestras al laboratorio para determinar qué hongos o bacterias han causado la infección para poder combatirlos mejor.
Las heridas en los pies son las más peligrosas
Los pies y los tobillos son áreas muy vulnerables en los pacientes de diabetes ya que tienen tendencia a inflamarse lo que retrasa la curación de las heridas. Si la herida se presenta en un brazo, por ejemplo, éste se puede inmovilizar aunque la persona pueda seguir trasladándose de un lugar a otro. Sin embargo, resulta mucho más difícil lograr inmovilizar totalmente el pie o una pierna mientras se cura la herida.
A los diabéticos se les dificulta además evitar heridas en los pies ya que tienen más probabilidades que otras personas de desarrollar callos, piel reseca y daños en las terminaciones nerviosas.  Todo eso aumenta las probabilidades de úlceras (llagas abiertas) y de infección.  Por si fuera poco, la diabetes también contribuye a una visión mala, así que se les dificulta ver y sentir si tienen una herida en el pie hasta que ésta empeora. Una herida que no sana, en el caso de los diabéticos, puede significar no sólo dolor e inconveniencias, sino un serio peligro de gangrena y hasta de amputaciones de un dedo, de varios o de todo el  pie.
No te descuides. Según informes de la American Podiatric Medical Association, hasta un 15% de los diabéticos desarrollan úlceras en los pies y por supuesto, no querrás ser parte de las estadísticas. Ten en cuenta que, en Estados Unidos, la diabetes es la causa más común de amputaciones en las extremidades inferiores que no hayan sido originadas por traumas o accidentes.
Prevenir es la clave
Como ya te hemos recomendado previamente en otros artículos de VidaySalud.com, la mejor manera de evitar complicaciones con las heridas de los pies es evitarlas.  Aquí ofrezco varios consejos para que puedas cuidar tu piel y tus pies de forma adecuada:
1.     Revisa tus pies diariamente: revisa cuidadosamente si tienes ampollas, callos, áreas peladas o enrojecidas. Si no puedes ver con claridad, pide ayuda a una tercera persona para que examine tus pies diariamente.
2.     Presta atención a la piel: revisa hasta cambios que parezcan insignificantes, como enrojecimientos o áreas inflamadas alrededor de las uñas. Si notas algún problema, consulta con tu doctor.
3.     Mantén los pies bien humectados: utiliza un humectante para mantener la piel de los pies bien suave, pero no uses lociones entre los dedos para evitar una infección por hongos. Para tratar el pie de atleta (una infección muy común), utiliza un medicamento en gel y no en crema para que no queden residuos entre los dedos.
4.     Usa calzado apropiado: si los zapatos te quedan o muy estrechos o muy grandes pueden causar ampollas.  Trata de que te ajusten lo mejor posible. Usa zapatos cerrados para evitar heridas en los dedos, incluso en tu hogar. Revisa los zapatos diariamente para eliminar cualquier piedrita o suciedad que pudiera entrar accidentalmente y causarte roces y heridas en la planta del pie.
5.     Cuidado con las medias: evita las que tengan costuras molestas que te rocen y las que mantengan la humedad. Si te es posible, adquiere las medias especiales para diabéticos.
6.     Lava cuidadosamente tus pies a diario y sécalos muy bien.
7.     Si tienes algún callo, trata de rebajarlo con una lima o piedra pómez. Nunca lo cortes ni con tijeras ni con navajas.
8.     Recorta tus uñas y lima los bordes para evitar las uñas encarnadas.

Gel plaquetario acelera la curación de heridas.

Científicos de la universidad de Cincinnati han visto que un gel de plaquetas creado a partir de la sangre del paciente ayuda a que la cicatrización de heridas se realice más rápido, al tiempo que previene las posibles infecciones.
El experimento se aplico a 8 individuos a los que se hicieron pequeñas incisiones en las piernas, a las heridas de una pierna se les aplico el gel creado de sus muestras de sangre y en la otra se les trato con antibiótico en pomada o vendajes utilizados comúnmente para tratar heridas. Se realizo el seguimiento de estas heridas y se vio que aquellas tratadas con el gel cicatrizaron más rápido que las que no; para el día 17 en los que recibieron el gel las heridas habían cerrado en un 81% mientras que los que fueron tratados por otros medios cerraron en un 57%.
La clave está en las plaquetas, pues estas inician el proceso de regeneración, pero su tiempo de vida es de apenas 10 días por lo que esta labor debe ser continuada por otras células. Al aplicar el gel plaquetario se estimulan los mecanismos de regeneración acelerando la cicatrización.
Debido a que el gel es proveniente de la misma sangre del paciente, se evitan los riesgos de reacciones alérgicas o transmisión de infecciones, además la cantidad de sangre requerida para la producción del gel no afecta al paciente y no se han presentado efectos secundarios adversos.
Aunque el estudio solo se hizo en individuos sanos se espera hacer análisis en personas con problemas crónicos para la cicatrización de heridas, tales como personas con Diabetes en las que esta se presenta de forma lenta, para ver si este método sería rentable.
Y por último, pero no menos importante, mantén tu diabetes bajo control.  Eso incluye monitorear tu nivel de azúcar en la sangre, tomar tus medicamentos, vigilar tu dieta y mantenerte físicamente activo.
No te olvides de darle la importancia que merece a cualquier herida en tus pies por pequeña que sea. De esta forma, sanará rápidamente, sin causar infecciones ni complicaciones innecesarias.

domingo, 26 de marzo de 2017

Medicina natural alternativa para tratar la diabetes



Trata Tu Diabetes
La forma natural de tratar y controlar la diabetes ha adquirido gran popularidad en los últimos tiempos con el aumento en el número de personas que sufren de diabetes en el mundo. El hecho de que los medicamentos utilizados para tratar la diabetes se asocia con varios efectos secundarios en el cuerpo y que se requieren estos medicamentos en base diaria es responsable de preparar el camino para tratamientos naturales para la diabetes. Además, las opciones de tratamiento naturales son mucho más eficaces y seguras en comparación con los medicamentos para controlar los niveles de azúcar en la sangre en el cuerpo. Mientras que definitivamente no son un sustituto del tratamiento médico convencional y el control regular, pueden ayudar a mejorar su condición considerablemente, reduciendo su dependencia de los medicamentos y en algunos casos reduciendo el riesgo de complicaciones que a menudo se desarrollan como resultado de la diabetes. Esta es una de las principales razones de aumento de las opciones de tratamiento natural para diabéticos en  América y parte del mundo.
Dieta de choque  Una investigación reciente estudio realizado por científicos británicos ha arrojado luz verde sobre la importancia de las dietas de choque a corto plazo de la diabetes tipo 2 en revertir los individuos diabéticos mediante la restauración de los niveles normales de azúcar en la sangre en el cuerpo. Los diabéticos que consumen alrededor de 800 calorías al día redujeron sus niveles de azúcar en la sangre y se devuelven a la salud normal dentro de unas pocas semanas.
Yoga Aparte de caminar de forma regular, incorporando la práctica regular del yoga se encuentra que es útil para los diabéticos. Las personas que sufren de este trastorno estilo de vida espantosa pueden comenzar su terapia de yoga con una simple serie de posturas de yoga como muktasana pawan. Las posturas de yoga que implican la meditación, la respiración o pranayama, savasana o postura del cadáver y actitudes de la inversión son eficaces en la revitalización del páncreas y la glándula pituitaria, que desempeña un papel clave en la regulación de los niveles de azúcar en el cuerpo.
La acupresión y la reflexología La acupresión es uno de los tratamientos naturales emergentes para una amplia gama de condiciones clínicas como la diabetes. Este enfoque de tratamiento para la diabetes implica el reconocimiento de los órganos afectados y el tratamiento de las enfermedades a través de sus puntos de acupresión. Dependiendo de los síntomas observados, se determinan los puntos de acupresión; esto significa que el exceso de orina implica la activación del punto de la vejiga y una sensación de ardor en el pie implica la activación del intestino delgado. Mientras que la reflexología ayuda en la gestión de los niveles de azúcar en sangre en los diabéticos.
La homeopatía y la naturopatía Hay un aumento en el uso de medicamentos homeopáticos para tratar y controlar la diabetes en la India. Una caída en los niveles de azúcar en la sangre puede ser vista en un lapso de tres meses con perfiles cuidado. Naturopatía implica una combinación de dieta, ejercicio (yoga) y baños de vapor para activar el páncreas y ayuda en la gestión adecuada de los niveles de azúcar en la sangre en el cuerpo. Leer más sobre la naturopatía como tratamiento de la diabetes .
Los remedios herbarios – Aunque los remedios a base de hierbas para el tratamiento de la diabetes han estado en uso desde tiempos antiguos, que están una vez más ganando popularidad a medida que se han realizado numerosos estudios de investigación de sus beneficios para la salud. Los remedios con hierbas comunes y más eficaces para el tratamiento de la diabetes son las hojas de curry, calabaza amarga, fenogreco, grosella espinosa india (amla) y bayas negras (jamun). La fácil disponibilidad y la eficacia de estos remedios naturales son responsables del rápido aumento en el uso de tales alternativas en el control y tratamiento de los niveles de azúcar en sangre.
Aparte de estos remedios naturales, modificaciones de estilo de vida como el ejercicio, el consumo de alimentos saludables y evitar los alimentos poco saludables juegan un papel clave en la prevención, así como la gestión de la diabetes, especialmente la diabetes tipo 2.